Uruguay, oficialmente la República Oriental del Uruguay, es un país de América del Sur, situado en la parte oriental del Cono Sur americano. Limita al noreste con Brasil, al oeste con Argentina y tiene costas en el océano Atlántico al sureste y sobre el Río de la Plata hacia el sur. Abarca 176 000 km², siendo el segundo país más pequeño de Sudamérica en cuanto a territorio. La población de Uruguay es de 3,29 millones de habitantes.
El país ostenta desde hace años una fuerte estabilidad política y social, respaldada en una democracia consolidada y fuerte seguridad jurídica. Actualmente, el sistema político cuenta con tres partidos mayoritarios, que se han alternado en el gobierno, manteniendo siempre un fuerte respeto por las reglas de juego y los fundamentos esenciales de la actividad económica. Esta cualidad es tomada por los inversores como un diferencial a la hora de optar por Uruguay, y es vista como un pilar fundamental del clima de negocios en el país.
Uruguay se ubica en los primeros lugares de América Latina -y en muy buena posición en el mundo- según los principales rankings que relevan aspectos de la estabilidad política y solidez democrática. Estos indicadores reflejan que Uruguay es un país con una sólida tradición democrática, basada en una transparente política de gobierno y en una amplia libertad económica.
La economía uruguaya ha logrado el período de crecimiento más largo de la historia, al acumular 11 años ininterrumpidos de aumento del producto - una expansión promedio anual de 5,7% - entre 2004 y 2013. Esta expansión vino acompañada de un crecimiento del PIB per cápita de Uruguay, que pasó de USD 10.000 en 2005 a casi US$ 17.000 en 2013. Esto ha permitido que Uruguay se ubique como la economía con mayor PIB per cápita de Latinoamérica (medido en dólares corrientes).
Uruguay es la puerta de entrada al Mercosur. El libre acceso al Mercosur le permite acceder a un mercado con más de 270 millones de personas, que acumula el 56% del PIB de Latinoamérica. Conjugando el Mercosur y el TLC que el país tiene con México, Uruguay accede libre de aranceles a un flujo de comercio exterior que representa casi el 70% del total de América Latina. Uruguay se posiciona como hub-logístico regional, con una ubicación destacada respecto de las ciudades más ricas de la región. La normativa de zonas francas, puerto/aeropuerto libre y depósitos aduaneros brinda un marco ideal para instalar centros de distribución a esas ciudades.
La inversión extranjera directa (IED) recibida por Uruguay alcanzó la cifra récord de US$ 2.796 millones en 2013, que consolida la última década como el periodo de más fuerte crecimiento de la IED en la historia del país. Este valor, equivalente al 5% del PIB, sitúa a Uruguay como el segundo mayor receptor de IED en términos del PIB en América del Sur. El 63% de las utilidades de las empresas extranjeras en Uruguay fueron reinvertidas en nuestro país.
El inversor extranjero goza en Uruguay de los mismos incentivos que el inversor local, no existiendo discriminación desde el punto de vista tributario. No se requiere autorización o registro previo para operar y no existen restricciones para la transferencia de capital o utilidades provenientes de las inversiones.